En Santa Cruz y en otras regiones, en las estaciones de servicio no les venden combustible a tanque lleno, por lo que no logran completar una vuelta de trabajo.
eju.tv
Fernando García Torrez / La Paz
La Confederación Nacional de Choferes de Bolivia se declaró este lunes en estado de emergencia por la venta racionada e irregular de diésel en el país, por lo que piden a las autoridades «hablar claro» respecto a la provisión de combustibles en el país.
«Hay molestia, hay protesta de nuestros compañeros, como confederación estamos hablando claro, qué es lo que está pasando en nuestro país, se cumple, no se cumple o cuál es el problema que existe, que nos digan de una vez por todas cuál va a ser la posición del Gobierno«, declaró en conferencia de prensa el ejecutivo del sector, Lucio Gómez.
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Este lunes 25, desde la ciudad de Santa Cruz y en otras ciudades del país se denunció que en las estaciones de servicio los choferes no pueden cargar diésel a tanque lleno, ya que les racionan el combustible, lo que ocasiona que no completen sus viajes y deban volver a formar filas.
«Queremos que cumplan con su compromiso de la distribución de diésel en todo el territorio nacional, que se mantenga la subvención, y si no es así, que también nos digan de frente», sostuvo Gómez.
El sector comunicó que la provisión de gasolina mejoró, aunque «sigue con falencias», pero, en el caso del diésel, «es totalmente diferente, dos, tres días hacen fila nuestros compañeros y eso va en desmedro del trabajo cotidiano que tienen ellos», informaron.
En todo el país se despachan a diario siete millones de litros de diésel, pero la demanda actual hizo que ese volumen se incremente a nueve millones de litros por día, de los que 3,5 millones son despachados y distribuidos en Santa Cruz para atender la demanda del transporte y del sector productivo, informó el ministro de Hidrocarburos, Alejandro Gallardo.