Revisarán el tratado de extradición y otros 100 convenios para adecuarlos. La ayuda de EEUU estará bajo la lupa del Gobierno boliviano. Los funcionarios estadounidenses ya no tendrán el estatus diplomático del pasado.
El diálogo con EEUU incluye la extradición de Goni
Labor. Revisarán el tratado de extradición y otros 100 convenios para adecuarlos.
La Razón – Iván Paredes – La Paz
Amparado en el acuerdo marco, Bolivia pondrá en la agenda de diálogo con EEUU el tratamiento de la extradición del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada (Goni), requerido en el país por el caso octubre-2003, y el esclarecimiento de la desactivación de los misiles chinos.
Conferencia. David Choquehuanca informó sobre el contenido del acuerdo con el país del norte
El canciller David Choquehuanca explicó ayer en conferencia de prensa que ambos gobiernos trabajarán en aspectos como la cooperación jurídica a través de equipos técnicos que analizarán el estado de las relaciones y temas que generen controversia.
“Seguramente veremos el tema de Sánchez de Lozada; permanentemente exigimos que Estados Unidos ayude para que se haga justicia en este caso”, explicó la autoridad, sin dar mayores detalles sobre cómo y cuándo empezarán a trabajar en este proceso.
El expresidente enfrentó en 2003 una revuelta social con un despliegue de militares que dejó un saldo de 68 víctimas fatales y provocó su dimisión. Está en el país del norte, junto a sus exministros Carlos Sánchez Berzaín, Jorge Berindoague y Guido Áñez. La Fiscalía acusa a las exautoridades por genocidio y solicita su extradición.
El pedido aún no fue atendido por autoridades estadounidenses. La Paz y Washington firmaron un tratado de extradición en 1995 que, entre otros aspectos, refiere que “no se concederá la extradición si el delito por el cual se la ha solicitado es de carácter político”, pero da paso si hay causales como “asesinato, homicidio doloso, secuestro, lesiones gravísimas, violación, corrupción sexual de menores, robo armado y delitos relativos al tráfico ilícito de sustancias controladas”.
Sánchez de Lozada insistentemente calificó como político el juicio instaurado en su contra. El exprefecto de Cochabamba Manfred Reyes Villa, acusado por delitos de corrupción, y un grupo de personas vinculadas con el caso terrorismo también están en el país del norte.
Choquehuanca informó de que la entrega y destrucción de los misiles chinos también estará en la agenda.
En la gestión del expresidente Eduardo Rodríguez (2005), el Ejército entregó al país del norte un lote de misiles chinos para su desactivación. Rodríguez, quien negó haber autorizado la entrega, tiene instaurado un juicio de responsabilidades por este hecho.
La Paz y Washington suscribieron el lunes un acuerdo marco que sienta la bases del relacionamiento bilateral, marcado desde 2008 por una compleja situación por la expulsión de embajadores y denuncias de injerencia contra la legación diplomática.
El Canciller informó de que la nueva realidad obligará a revisar los acuerdos y tratados bilaterales para adecuarlos a la Constitución. Según reporta la página web de la Embajada de EEUU en La Paz, existen más de 100 acuerdos bilaterales, entre ellos el tratado de extradición.
La lucha contra el narcotráfico, el fortalecimiento de las relaciones comerciales y el respeto a la soberanía también forman parte de los ejes “críticos” de cooperación bilateral. Paralelamente expresaron ambos estados el interés de reponer a embajadores.
Formarán una comisión técnica para mejorar la cooperación judicial. Cada dos años harán una evaluación.
Cooperación bilateral
Los estados de Bolivia y Estados Unidos definirán el destino institucional y geográfico de la cooperación del país del norte. El acuerdo marco rompió la unilateralidad sobre la cooperación, informó el canciller Choquehuanca.
OEA celebra el acuerdo entre los dos países
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, aplaudió la firma del acuerdo marco entre Bolivia y Estados Unidos, que sienta las bases de la relación bilateral y da paso a la reposición de embajadores en La Paz y Washington.
“Es una buena noticia que ambos países hayan firmado un acuerdo que apunta, entre sus objetivos principales, a fortalecer y profundizar las relaciones bilaterales”, afirmó Insulza, según un comunicado de la organización.
Añadió que la firma de este acuerdo “representa la voluntad de ambos gobiernos de trabajar conjuntamente en temas bilaterales de interés común y también de interés hemisférico”. La Paz y Washington firmaron el lunes el acuerdo marco que sienta las bases de la nueva relación y da paso a la reposición de embajadores, expulsados en ambos países el 2008.
El documento prevé una relación de respeto mutuo a la soberanía de los estados y su integridad territorial. Además, promueve el desarrollo humano, económico, social y cultural. Insulza dijo que “el diálogo a través de los canales diplomáticos y de cooperación es el único camino para resolver las diferencias y profundizar las relaciones entre los países”.
Comisiones operativizarán el convenio
Bolivia y Estados Unidos constituirán comisiones técnicas que definirán cómo implementarán los ejes del acuerdo en áreas como la lucha contra el narcotráfico y el comercio, informó el canciller David Choquehuanca.
“Que la agencia antidrogas DEA no vuelva a Bolivia, no quiere decir que no llevemos una tarea conjunta contra el narcotráfico (…) Habrá una comisión en el tema de la lucha contra el narcotráfico que establecerá cómo será la lucha antidroga”, explicó la autoridad.
Además de la comisión antidrogas, formarán instancias de trabajo en las áreas de comercio e inversiones y cooperación económica. Cada dos años habrá reuniones para analizar la relación bilateral y fortalecer el diálogo.
La DEA fue expulsada de Bolivia en 2008, acusada de injerencia política. Consultado si se buscará reponer el acuerdo de Promoción Comercial Andina y Erradicación de la Droga (ATPDEA), el Canciller respondió que la temática comercial será parte del trabajo de una comisión técnica.
No hay fecha para las reuniones de las comisiones técnicas. El acuerdo marco firmado el lunes en Washington establece principios como el respeto mutuo.
"Uno de estos principios es el abstenerse de intervenir en asuntos internos de otros estados, al igual que elegir sin injerencias externas su sistema político, económico y social, así como del respeto universal de observancia de los derechos humanos”, afirmó.
El vicecanciller Juan Carlos Alurralde y la subsecretaria de Estado para la Democracia y Asuntos Globales de Estados Unidos, María Otero, firmaron el convenio el lunes en Washington, al cabo de una negociación de tres años.
Tres comisiones rigen la relación con EEUU
El canciller explicó los alcances del nuevo acuerdo marco. David Choquehuanca aseguró que el intercambio comercial se regularizará dentro de unos años.
La Prensa – 10/11/2011
El acuerdo marco suscrito por autoridades de Bolivia y Estados Unidos dispone la creación de tres comisiones de consulta permanente y realizar reuniones de evaluación entre los dos países para tener una relación bilateral más fluida y de “igual a igual”, informó ayer el canciller David Choquehuanca en conferencia de prensa.
El lunes, en Washington, fue suscrito el acuerdo marco para dar lugar al proceso de recomposición de las relaciones diplomáticas bilaterales después de que el 15 de septiembre de 2008 el presidente Evo Morales expulsara al embajador Philip Goldberg, a quien acusó de conspiración.
“Los elementos concretos del acuerdo se basan en el diálogo político, la responsabilidad compartida en la lucha contra el narcotráfico y las acciones de cooperación, comercio e inversiones”.
El diálogo político. “Antes no había una instancia que nos permita llevar adelante un diálogo político, ahora se va a formar una comisión conjunta para abordar toda esta temática con reuniones cada dos años”.
Anunció que una de las tareas prioritarias de esta instancia política entre los dos países será lograr la extradición del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada, quien se encuentra en EEUU después de su renuncia en octubre de 2003 por presión de los sectores populares.
La autoridad de Relaciones Exteriores indicó que esta estructura de comisión de consulta será también implantada en las áreas de comercio y de lucha contra el tráfico de drogas.
No obstante de que reiteró que la DEA no volverá a Bolivia, se coordinará acciones para sostener la lucha contra este ilícito.
“Uno de los temas que se tiene que encarar de manera global es la lucha contra el narcotráfico, con Estados Unidos, actualmente se recibe una cooperación y este acuerdo permitirá seguir la lucha contra el narcotráfico. La DEA no va a volver a Bolivia”.
EL Comercio. Choquehuanca indicó que los acuerdos comerciales con Estados Unidos podrán demorar hasta tres años, porque se debe observar una serie de requisitos para establecer el tipo de comercio que se establecerá entre ambas naciones.
“Los procesos de negociación con EEUU demoran. No se harán de la noche a la mañana. Este acuerdo nos permite sentarnos en una comisión de trabajo para que se pueda establecer nuestra relación comercial”, aclaró.
Los embajadores. La autoridad indicó que la designación de embajadores será analizada por una comisión de ambos países, que se definirá el perfil de los representantes en La Paz y Washington.
Además, habrá que considerar los mecanismos internos propios de ambos países para designar a sus representantes diplomáticos.
Con el intercambio de embajadores, la relación bilateral se normalizará por completo.
163 años de relaciones diplomáticas mantienen a Bolivia y a Estados Unidos, con diferentes etapas.
La frase
“La cooperación se definirá de Estado a Estado, se deben respetar las leyes nacionales de ambos países para ejecutarla”.
David Choquehuanca / CANCILLER
La ayuda de EEUU estará bajo la lupa del Gobierno boliviano
De manera conjunta definirán áreas geográficas e instituciones.
Privilegios. Los funcionarios estadounidenses ya no tendrán el estatus diplomático del pasado. Afirman que ya no habrá definición “unilateral” de la ayuda.
Página Siete / La Paz – 10/11/2011
La cooperación estadounidense ya no llegará directamente a las instituciones ejecutoras, pues el Gobierno boliviano tendrá la facultad de controlar y fiscalizar los recursos económicos y definir de manera conjunta las áreas geográficas de intervención.
El Gobierno considera fundamental que, en materia de cooperación, EEUU ya no defina de manera “unilateral” el destino de la ayuda para diferentes proyectos en el país.
“Las áreas geográficas de la cooperación se definen de Estado a Estado; las instituciones ejecutoras de la cooperación vamos a definir de Estado a Estado”, explicó Choquehuanca.
El jefe de la diplomacia boliviana recordó que en el pasado el Estado no tenía “control” y tampoco “información” acerca de las actividades de la cooperación. Dijo que esto cambiará a partir del nuevo convenio.
La cooperación de EEUU, que antes llegaba de manera directa a las organizaciones sociales, organizaciones no gubernamentales, municipios, gobernaciones, entre otras instituciones, ahora tendrá un filtro o una “comisión” integrada por funcionarios estadounidenses y bolivianos que analizarán los proyectos.
“La cooperación viene a veces para niños, departamentos, viene para indígenas, para los municipios. El Estado no tenía control ni siquiera información, ahora vamos a tener información, vamos a definir”.
Choquehuanca afirmó que accederán a información sobre los proyectos que “están en curso” para ser ejecutados.
El Gobierno criticó la forma en la que EEUU -a través de su embajada- manejó su presupuesto de apoyo a Bolivia, sin participación gubernamental.
Los proyectos estaban orientados a apoyar en las áreas de fortalecimiento institucional, democracia, justicia, salud, medio ambiente y producción.
En el caso de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), ésta tiene una intervención con diferentes proyectos en los nueve departamentos del país. Este organismo fue acusado de cometer presuntas acciones políticas mediante sus proyectos.
El canciller Choquehuanca manifestó que su deseo es que las relaciones con EEUU, que “siempre fueron difíciles”, mejoren con el objetivo de construir vínculos de respeto mutuo, de igualdad y de respeto a la integridad territorial y soberanía.
Este tema, al igual que muchos otros, será abordado en comisiones de trabajo que serán conformadas una vez que se designe a los embajadores de ambos países, que según la autoridad será la acción siguiente.
Antes y después del convenio
El canciller David Choquehuanca destacó ayer las diferencias entre el pasado y el futuro de las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Bolivia después de la suscripción del acuerdo marco.
El jefe de la diplomacia boliviana anotó que el establecimiento de “principios” marca la primera gran diferencia con la anterior forma de relacionarse.
El respeto a las leyes nacionales de ambos países es otra de las características que apuntó el ministro de Relaciones Exteriores.
Otro punto es la conformación de una instancia de diálogo político que se reunirá cada dos años para revisar el acuerdo y fortalecer las relaciones.
La lucha contra el narcotráfico se realizará bajo el principio de responsabilidad compartida para prevenir y combatir este ilícito, según dice el acuerdo.
Los funcionarios estadounidenses no tendrán el estatus diplomático como en el pasado, ésta es otra de las cualidades del acuerdo, según explicó en conferencia de prensa el ministro de Relaciones Exteriores.
Finalmente, Choquehuanca dijo que los acuerdos y convenios deben ser revisados porque no deben contravenir la Constitución Política del Estado.