Diputada Prado: personajes emblemáticos del narcotráfico y la corrupción representan a Bolivia en el exterior

ALEP2 La designación de la modelo y ex candidata a la Gobernación de Beni por el Movimiento Al Socialismo (MAS), Jessica Jordan, como Cónsul de Bolivia en Nueva York, Estados Unidos a partir del próximo 2 de mayo, es otra expresión de desprecio del gobierno de Evo Morales no sólo a Estados Unidos sino a la comunidad internacional toda, porque quienes representan a Bolivia son personajes cuestionados por su vinculación al narcotráfico, corrupción y violación de derechos humanos, como es el caso de Sacha Llorenti, declaró hoy la diputada de Convergencia Nacional (CN), Alejandra Prado.

“Lo que el gobierno del Presidente Evo Morales está haciendo con la diplomacia boliviana es vergonzosamente impresionante. Enviando a Jordan como cónsul a Estados Unidos, no sólo es una clara muestra de desprecio a esa nación, sino a las relaciones internacionales en general porque quienes representan a Bolivia son personajes de baja calaña dados sus antecedentes y roles que jugaron como autoridades de Estado”, indicó.

Prado indicó que Jordan fue muy cuestionada en Brasil debido a presuntas vinculaciones con el narcotráfico.



“En el ámbito diplomático el Estado boliviano no muestra respeto a ninguna nación, esto consta por las designaciones de embajadores y cónsules que realiza, dejando de lado a profesionales bolivianos que invirtieron sus recursos, tiempo y vida a formarse como diplomáticos, dejando de lado la competitividad y la experiencia de esos recursos humanos que se prepararon para relacionar a Bolivia con el mundo”, añadió.

Prado recordó que hasta el pasado año apenas dos de 34 embajadores eran de carrera. Hasta septiembre del 2013, siete militares en servicio pasivo, tres dirigentes sindicales y una gama de profesionales políticos cercanos al MAS copaban el servicio exterior de Bolivia, so pretexto de que están aplicando la denominada "diplomacia de los pueblos".

“El propio presidente señaló que estas personas trabajen con línea política, entonces Bolivia no puede esperar nada de sus relaciones diplomáticas con el orbe”, concluyó Prado.