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El senador José Serra, dirigente del socialdemócrata partido PSDB, fue designado por el presidente interino Michel Temer como nuevo canciller de Brasil, lo que supone la llegada al gabinete brasileño de uno de los más duros críticos de los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, a los cuales ha calificado abiertamente como dictaduras, responsables de represión y asesinatos.Serra, ex alcalde de la ciudad de Sao Paulo, ex gobernador del estado de Sao Paulo y ex candidato presidencial de su partido (fue derrotado por Lula da Silva en 2002 y por Dilma Rousseff en 2010) no se ha pronunciado hasta ahora sobre cómo será su ejercicio en el estratégico cargo de canciller.Temer es militante de otro partido, el PMDB, que hasta ahora era aliado de Dilma Rousseff en la fracturada coalición de gobierno.El PSDB (el cual ayudó a fundar Serra junto con el expresidente Fernando Henrique Cardoso) ha sido durante los últimos 14 años uno de los más severos críticos del PT y de los gobiernos de Lula y Rousseff.Serra, electo senador por el estado de Sao Paulo con 11,1 millones de votos (60% del total) dejará el Parlamento para asumir la tarea de representar internacionalmente a un gobierno interino acusado por Rousseff y Lula de ser producto de un golpe de Estado legislativo.En los últimos meses Serra colecciona una serie de duras intervenciones públicas y declaraciones de prensa particularmente fuertes contra el gobierno de Nicolás Maduro.En junio de 2015 emitió una “nota de repudio a la trama de la dictadura venezolana”, cuando el año pasado una comitiva de su país fue agredida en la autopista Caracas La Guaira por bandas chavistas. “No hay más espacio en el mundo para la falta de libertades”, dijo entonces.“Son inaceptables las hostilidades cometidas contra la comitiva de senadores brasileños en Venezuela. Queda más claro todavía que Brasil no puede hacerle coro a las dictaduras. Suspender al gobierno de Venezuela del Mercosur es la mejor repuesta inmediata”, dijo al mostrar su solidaridad con los senadores y periodistas agredidos cuando la caravana de visitantes que pretendían visitar a los presos políticos, fue interceptada en la autopista y no pudo llegar a Caracas.Serra además, fue ministro de Planificación y de Salud de Cardoso (se hizo famoso internacionalmente por quebrar las patentes de grandes laboratorios farmacéuticos para fabricar en Brasil medicinas para portadores de HIV/Sida, y establecer un programa de distribución gratuita de tratamientos). En los inicios de su carrera política fue perseguido por la dictadura militar brasileña, y se refugió en Chile, donde fue profesor universitario.Tras el golpe de Augusto Pinochet fue preso y recluido en el Estadio Nacional de Santiago, de donde logró escapar para refugiarse en la embajada de Italia (país de sus ancestros). De allí escapó a Estados Unidos, donde hizo una maestría y doctorado en Ciencias Económicas en la Universidad de Cornell y fue profesor del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Princeton.En mayo de 2015, cuando a instancias de su partido una comisión del Congreso de Brasil recibió a las esposas de los presos políticos venezolanos, Lilian Tintori y Mitzy de Capriles, Serra tuvo una dura intervención contra el chavismo.“Quiero que Mitzy y Lilian sepan que tienen aquí en el Senado brasileño un frente de defensa de la democracia de su país, de solidaridad con los perseguidos políticos de Venezuela, con los torturados y familias de los asesinados”, dijo Serra entonces.Acusó al Defensor del Pueblo, Tareck William Saab (quien también viajó a Brasil por esos días a contrarrestar la visita de la disidencia venezolana) de ejercer su cargo en realidad en defensa del gobierno de Maduro.“Ese ciudadano ejerce el cargo de defensor entre comillas y fue uno de los organizadores de la represión a las protestas en 2014 que llegó a provocar el asesinato de 43 venezolanos. Ese ciudadano es coresponsable por la autorización dada a la policía venezolana de abrir fuego contra manifestantes, darle tiros a los manifestantes”, dijo entonces.También acusó al gobierno de Maduro de darle apoyo a fuerzas paramilitares de represión “que están inspiradas en las tropas de asalto nazistas y fascistas de Italia y Alemania de los años 30”.“Son brigadas mantenidas, y organizadas y pagadas por el Estado venezolano”, dijo en aparente alusión a los llamados colectivos y otros grupos chavistas que suelen tomar las calles de Venezuela para reprimir a los opositores y periodistas.Acusó a Lula y a Chávez de haber desperdiciados oportunidades históricas con las alzas de los precios de las materias primas y productos básicos agropecuarios, y del petróleo y haber agravado la vulnerabilidad de sus economías.“Es muy curioso que los dos se presentaran como izquierdistas y haber desindustrializado y aumentado la vulnerabilidad de sus economías. Los dos paralelamente dejaron una herencia terrible para sus sucesores, escogidos completamente sin preparación para gobernar sus países”, recalcó hace un año.También criticó que el comportamiento del gobierno de Brasil cuando en 2014 “no fue capaz de tener una posición digna con relación a esas masacres callejeras” cometidas en Venezuela.“Esa situación nos molesta mucho, porque tenemos en el Congreso una mayoría contraria a la dictadura venezolana y tenemos que esforzarnos para que el repudio se aplique”, se quejó entonces.Fuente: elestimulo.com