Es una broma de mal gusto que representantes de gobiernos cuyas bases desarrollan sendas actividades ilícitas tengan el atrevimiento de acusar a la prensa independiente y a los parlamentarios fiscalizadores de constituir “mafias político-mediáticas”.Es el mundo del revés donde conviven ex asaltantes de remesas universitarias con homicidas de policías erradicadores de coca excedentaria.El mundo de las mafias sindicales cuyo cultivo va en un 95% al abastecimiento del narcotráfico. El de los aliados de los grandes cárteles seudo-bolivarianos.El del crimen organizado contra la república, que golpea sistemáticamente derechos individuales y ordenamientos constitucionales. El mundo del populismo necropolítico que tritura y «suicida» seres humanos y que sustituye verdades por artificios neo-goebbelianos.Es el mundo del revés de los gobiernos del hampa…[email protected]