A pesar de la disposición de más de 160 mil vacunas, hay poca afluencia en los puntos de vacunación para protegerse de esta infección que recrudece en el invierno y puede complicar la salud de los grupos más vulnerables, como los niños.
En los primeros cinco días de la campaña de vacunación se ha inmunizado a 2.100 adultos mayores de 60 años y a 200 niños. El Servicio Departamental de Salud (Sedes) pide a la población acudir a los centros de salud para aplicarse la vacuna que protege contra la influenza estacionaria y otras infecciones respiratorias, como la gripe AH1N1 y AH2N3.
La primera fase de la campaña prioriza los grupos de riesgo: niños menores de 2 años, los mayores de 60 años, embarazadas, personas con enfermedades de base y el personal de salud.
Sin embargo, ante la poca afluencia y la necesidad de que la vacuna se aplique al menos un mes antes del invierno, se analizará abrir a más grupos, declaró ayer el jefe de Epidemiología del Sedes, Rubén Castillo.
Casa por casa
Con el objetivo de proteger a la mayor cantidad de personas contra la influenza, algunos establecimientos, como el hospital Édgar Montaño, activaron brigadas para la vacunación casa por casa.
Las brigadas móviles se desplazan en diferentes barrios. Un equipo del hospital visitó diferentes juntas vecinales para vacunar contra la influenza a personas de la tercera edad.
La responsable del área de enfermería del centro, Lesli Cáceres, explicó que no sólo se aplican las dosis contra la influenza, sino también contra las enfermedades del tétanos, polio, sarampión, entre otras enfermedades prevenibles.
Fuente: lostiempos.com