Alemania democrática era en realidad Alemania comunista…

Ismael Schabib Montero*

SCHABIB2 Es un contrasentido que el gobierno diga que privilegia la vida, si propugna la legalización de la coca con la que se elabora cocaína, que es un producto de “destrucción masiva” y propiciador de una las peores amenazas que también niega la vida: El crimen organizado.

Quisiera decirle a los jóvenes, que la “Guerra Fría” se caracterizó por el uso intenso de la propaganda, del engaño; en ese orden de ideas, la parte de Alemania que como resultado de la Segunda Guerra Mundial quedó bajo el dominio de la ex URSS, era Alemania comunista, pero se la conocía oficialmente como “Alemania Democrática” ¿Qué tal? Esa “es la dialéctica del engaño”, una lógica sin lógica, que nuestro gobierno aplica eficientemente.



Para muchos académicos las únicas ideologías políticas son el liberalismo y el comunismo, las demás son híbridas; toman lo que coyunturalmente les conviene de cada una.

El liberalismo es muy coherente con la naturaleza del ser humano, propala la libertad política y económica, respeto a los DD.HH., democracia representativa, libertad de pensamiento, el Estado sólo debe meterse para proteger al pueblo.

El comunismo sostiene en teoría, que los medios de producción deben estar en manos del Estado, salud y educación gratis para todos, pero sin libertad, sin democracia, para nada; unos pocos que nadie ha elegido, a nombre del Estado piensan y actúan por todos indefinidamente; la “democracia” que practican los países socialistas como Cuba, es con un solo partido, hacen elecciones donde “no hay elección”; en la ex URSS, cuando este país tenía 250 millones de habitantes, por la década de los años 70s, el partido comunista tenía sólo dos decenas millones de adherentes, no representaba ni el 10% de la población y en esa minoría existía una lucha encarnizada por el poder donde todo valía.

Después de la Segunda Guerra Mundial Stalin hizo matar a más de 20 millones de personas por la sola sospecha que eran sus rivales. El presidente de Corea del Norte ordenó matar a su tío hace unas semanas acusado de deslealtad. Castro se deshizo, incluso de sus compañeros de lucha de la “Sierra Maestra” como Huber Mattos, primero lo metió preso y luego lo expulsó de Cuba. Posteriormente al General Arnaldo Ochoa, que se proyectaba como un líder, un héroe nacional que combatió en todas las guerras del mundo donde él lo mandó, lo acuso de narcotráfico, hizo un show televisivo de su juicio, con señal internacional, donde se lo veía abatido o drogado al pobre hombre, fue fusilado.

En Bolivia, este gobierno ha mostrado su verdadera cara cuando le prohíbe pensar a sus adherentes; ¡Les prohíbe pensar! Los trata como a bestias. Cuando el Sr. Morales dijo que contra la ley “le mete nomás y que arreglen los abogados…”, se está auto proclamando delincuente; aprueba la re- reelección del Sr. presidente como candidato cuando el punto II de las Disposiciones Transitorias de la Constitución Política del Estado dice: ”Los mandatos anteriores a la vigencia de esta Constitución serán tomados en cuenta a los efectos del computo de los nuevos periodos de funciones” con el argumento de que Bolivia ha sido refundada como si todos fuésemos estúpidos. Hacen compras millonarias sin licitaciones y acusan a los anteriores gobiernos de corruptos.

En estos días cuando un mega circo está aconteciendo, con motivo de la reunión del G-77+China en Santa Cruz de la Sierra, el gobierno “descolonizador”, coloniza sin disimulo y rubor culturalmente al Oriente boliviano, perdiendo la oportunidad de oro para poner en la vitrina a la otra cara de Bolivia que es un país diverso. La diversidad es una fortaleza.

La oposición, debemos ganar las elecciones para que no nos pase lo de Venezuela, donde perdura un gobierno que todos saben que es malo, ilegítimo e ilegal, vende patria; un país gobernado por extranjeros; ¿Cómo pasó eso? Por la “dialéctica del engaño”, el caballo de Troya fue un militar, Chávez, ¿Quién lo iba a imaginar? Además tiene como a uno de sus principales pilares esa gran masa sobre dimensionada de empleados públicos que teme perder su empleo; han neutralizado a sus FFAA reestructurándolas a la medida de sus objetivos poniendo como bandera el anti “imperialismo”; esto está sucediendo en Bolivia más disimulado, no permitamos que lo consoliden.

*Vicealmirante de la República de Bolivia