El Duende y el EGTK

DUENDETragicómica. Así es la situación actual del Órgano Electoral, ante cuyas realidades no se sabe si reír o llorar.Por un lado, proliferan las denuncias sobre trampas orquestadas por el oficialismo con la complicidad del Tribunal, para empadronar a militantes acarreados en zonas donde el partido de gobierno perdería las elecciones municipales de no mediar estas prácticas ilegales.Al mismo tiempo, se desarrolla en el TSE una comedia de enredos que tiene por protagonistas a los vocales, el destituido director del Servicio de Difusión (SIFDE), el viceministro de descolonización y una mascota con forma de duende.Mientras los vocales destituyen al ex terrorista del EGTK Juan Carlos Pinto del SIFDE -lo que podría ser un mínimo paso positivo, recordando sus intentos de censura a Internet y su creencia de que “habría sido más fácil fusilar a los opositores”-, éste alega que el TSE no entendió la “democracia intercultural” y se empeña en ser “solo una CNE”. Lo que tal vez signifique que el ex compañero de armas del vicepresidente era más radical en cuanto al alineamiento del Tribunal con el régimen evista.Por su parte, el viceministro Félix Cárdenas -el mismo que propuso purgar a varios clásicos bolivianos de la currícula escolar-, dice que la mascota elegida por el TSE para promover el empadronamiento no sería lo suficientemente vernácula, algo bastante obvio viendo sus aires más celtas que plurinacionales.Pero el funcionario no terminó allí, sino que requirió al Tribunal “comprobar la existencia de los duendes” para validar la mencionada mascota.En resumen, estamos ante una catastrófica destrucción institucional de un poder del Estado, nada menos que el encargado de garantizar la seriedad de los procesos electorales.Una cosa es segura: el otro duende, el que cambia cifras en favor del oficialismo, seguirá haciendo de las suyas impunemente…[email protected]