La fracción del partido leal al expresidente Evo Morales tenía previsto para hoy un congreso para la renovación de la directiva del MAS-IPSP, pero ante la negativa del TSE de supervisar el encuentro se convertirá en una concentración en Villa Tunari.
eju.tv
Juan Carlos Véliz / La Paz
El congreso del MAS evista que se realizará hoy en Villa Tunari (Cochabamba) se perfila como un mitin contra la «crisis económica» caracterizada por la falta de dólares y carburantes después de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) determinó que no supervisará el encuentro en el que se debería renovar la directiva del partido.
«Para nosotros es importante este congreso porque se van a analizar temas del país, cómo estamos económicamente, cómo estamos socialmente y cómo estamos políticamente también, no estamos viviendo bien los bolivianos y ese es un tema que nos está preocupando, la crisis económica», adelantó ayer la diputada Bertha Acarapi en declaraciones a radio Kawsachun Coca.
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El partido que tenía previsto realizar un congreso en Villa Tunari para la renovación de su directiva como señala la normativa vigente, pero ante el rechazo de supervisión por parte del TSE el evento se convertirá en una plataforma para demandar a Luis Arce soluciones a la escasez de divisas, carburantes y la inflación.
En el encuentro también se abordará la «crisis política», según adelantó Acarapi, porque en los últimos meses «el Tribunal Constitucional quiere subordinar al órgano Legislativo, en referencia a la reciente solicitud del órgano Ejecutivo al Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) sobre la legalidad de la sesión de la Asamblea Legislativa que cesó en sus funciones a magistrados del órgano Judicial que se prolongaron en sus funciones desde diciembre de 2023.
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La falta de carburantes, especialmente del diésel, también será otro tema de la agenda del encuentro porque perjudica a los transportistas y comerciantes.
«Ya no podemos realizar viajes frecuentes y con normalidad, pasamos más tiempo haciendo fila en los surtidores en todos los departamentos, eso no es saludable para nuestro trabajo y afecta a nuestra economía. El problema continúa, no sé qué soluciones nos dará y nosotros estamos en estado de emergencia», manifestó un dirigente del transporte pesado de Oruro, citado por Kawsachun Coca.
Bolivia afronta una situación económica compleja como consecuencia de la escasez de divisas, la falta de carburantes, la caída de sus reservas internacionales y otros factores; sin embargo, el Gobierno garantizó la provisión de energía y dólares.
